En el barrio Monseñor Lezcano, Distrito II de Managua, un sujeto a quien apodan «El Tuerto» fue capturado justo cuando quería cometer un delito. La «gárgola» ambulante ya cargaba con algunos enseres que había robado en la vivienda propiedad de Doña Juna María Mojica, ubicada de la estatua, una cuadra al sur y tres arriba, de este barrio capitalino.
El peligroso sujeto que supuestamente se dedica a vender agua helada, pensando que dentro de la casa únicamente habían unos abuelitos, se introdujo como «Pedro por su casa», pero lo que nunca pensó es que en el cuarto estaba uno de los nietos, que sin pensarlo dos veces lo detuvo, no sin antes darle una buena lección para que no vuelva a cometer esa fechoría.
Don Iván Zavala, vecino de la señora víctima del robo que gracias al rápido actuar fue frustrado, dijo que «El Tuerto» no es la primera vez que comete ese delito y que en el barrio ya han ocurrido otros casos. El testigo dijo además que hace pocos días a uno de los vecinos se le metieron a la casa y que se le llevaron muchas pailas, un televisor y otros enseres por lo que se sospecha que el autor haya sido el mismo sujeto.
Por su parte la «pinta», que sufrió algunas lesiones en el rostro, dijo que es la primera vez que realiza un robo y pidió perdón a las víctimas, asegurando que con la paliza asestada aprenderá la lección y que mejor buscará como trabajar para alejarse de los robos.
Al lugar llegaron agentes del complejo policial Ajax Delgado, quienes trasladarían a «El Tuerto» hasta la delegación policial, lugar donde tendrá que responder por la acusación en su contra.