La Catedral de León fue el escenario de un gran tributo a nuestro Príncipe de las letras castellanas Rubén Darío, que rindió el Presidente de la República, Daniel Ortega, la Coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, líderes religiosos católicos, el Ejército de Nicaragua, Policía Nacional e invitados especiales. En este acto conmemorativo del centenario del paso a la inmortalidad de Darío la iglesia católica se integra al festejo que el Gobierno impulsa para honrar la memoria y legado de un brillante panida. » La iglesia se une gozosamente a estos festejos», expresó monseñor Bosco Vivas, Obispo de la Diócesis de León.
Por su parte, el alcalde de ese departamento, Róger Gurdián sostuvo que debemos seguir el ejemplo de Rubén en construir esta nueva unidad latinoamericana y caribeña.
Posteriormente, el mandatario nicaragüense, enfatizó que es necesario mantener vivo legado del Padre del Modernismo, quien promulgó el amor, la paz, la vida, y la dignidad.
El Presidente Ortega también cuestionó el armamento atómico de los grandes países que perjudican a la humanidad. » Porque nosotros no compartimos que se inviertan recursos para la muerte con el armamento atómico», puntualizó.
También mencionó que estuvo visitando la tumba del gran poeta universal en el 2007 tras asumir la Presidencia, y en otra ocasión estuvo en el emblemático lugar con el Comandante Hugo Chávez.
En este evento se colocó ofrenda floral en la tumba del inmortal poeta. La jerarquía católica mostró al mandatario el acta de bautismo y el acta de defunción del gran poeta nicaragüense.