Asia padeció ayer por una ola de frío que provocó la muerte de dos personas en Japón y retrasos en corridas de trenes en el primer día de vacaciones por el Año Nuevo chino, que sigue el calendario lunar.
Las autoridades chinas decretaron el nivel de alerta naranja para las condiciones climatológicas extremas.
Al menos 38 trenes sufrieron retrasos, informó la agencia de noticias Xinhua.
En Pekín se reportaron hasta -16 grados Celsius, la más baja de los últimos 30 años, informó el Centro de Meteorología Nacional.
Además, en las provincias de Zhejiang, Fujian y Guangdong, en el sureste, se podrían alcanzar las temperaturas más bajas jamás registradas.
En el norte del gigantesco país la temperatura bajó entre 10 y 13 grados, mientras que en el este y en el centro hizo entre 6 y 8 grados Celsius menos que la temperatura media.
En la región de Mongolia interior china el termómetro marcó -47.5 grados. La televisión estatal del país mostró imágenes de agua hirviendo que al instante se convierte en vapor helado cuando se lanza al aire frío.
El frío llegó incluso a la isla subtropical de Amani, en Japón, en donde se registró la primera nevada en 115 años, según los medios locales.
Las temperaturas bajaron a un récord de 4 grados Celsius en Okinawa, un paraíso para las vacaciones, conocido por muchos como el Hawai japonés.
En la ciudad de Nagasaki, en la isla de Kyushu, se llegaron a acumular 17 centímetros de nieve, un récord según el centro de meteorología.
Muchos vuelos fueron cancelados y el transporte por ferrocarril también se ha visto afectado en la parte oeste del país.