Brasil ha confirmado este jueves la muerte de cinco bebés con malformación congénita causada por el Zika, un virus endémico de África y que ha comenzado a propagarse por Latinoamérica, según el ministerio de Salud.
De acuerdo con el informe epidemiológico, en total fueron notificados 49 óbitos de bebés con malformaciones, de los cuales en cinco está confirmada la relación con el virus Zika, que es transmitido por el Aedes aegypti, el mismo mosquito responsable por el dengue y el Chikungunya.
Las cinco muertes fueron registradas en el noreste del país, región donde se han notificado el mayor número de casos de microcefalia, una rara enfermedad que hace que los bebés nazcan con la cabeza más pequeña de lo normal.
Además de las cinco muertes, las autoridades confirmaron que un bebé del estado de Minas Gerais (sureste) nació con microcefalia después de que su madre tuviera contacto con el virus.
De esta forma, el ministerio de salud tan sólo ha confirmado seis casos de malformaciones congénitas causadas directamente por el Zika.
También se ha reducido el número de casos de microcefalia confirmados supuestamente causados por el virus Zika debido a un reajuste en los cálculos del ministerio de salud.
Según explicaron fuentes de la cartera, los estados brasileños habían estado notificando casos de microcefalia presuntamente ligada al Zika sin que existieran indicios suficientes que vincularan la enfermedad al virus, por lo que el Ministerio ha decidido cambiar el cómputo.
Según el Gobierno, en todo el país se han registrado 3.893 casos sospechosos de microcefalia, los cuales podrían ser causados por el Zika u otro agente infeccioso, pero en sólo 224 casos fue confirmada por el momento la enfermedad, mientras que el resto todavía están siendo investigados.
El año pasado, cuando el Zika no había llegado a Brasil, sólo se registró un centenar de casos de bebés nacidos con microcefalia.
Un estudio divulgado por el Instituto Carlos Chagas, un laboratorio público brasileño, ha confirmado que el Zika consigue atravesar la placenta de las gestantes y pone en riesgo la protección del feto.
El director del departamento de vigilancia de enfermedades transmisibles del ministerio de salud, Claudio Maierovich, ha afirmado que el Gobierno se plantea la posibilidad de usar en un futuro mosquitos modificados genéticamente, los cuales han demostrado dar resultados, para controlar la población de Aedes aegypti, aunque en pequeña escala.
La empresa Oxitec, la filial británica de la compañía estadounidense de biología sintética Intrexon, asegura que las pruebas realizadas mostraron que los mosquitos modificados genéticamente han ayudado a reducir la proliferación del Aedes aegypti hasta un 82% en las localidades que se han usado.
«Hemos intentado conocer todas estas propuestas», aseguró Maierovich en una rueda de prensa.