Los ciudadanos Washington y del resto del este de Estados Unidos se preparan para una gigantesca tormenta de nieve que amenaza enterrar este fin de semana a la capital, sumida ya en problemas de tránsito debido a leves nevadas.
«Una gran tormenta de nieve afectará a la región del este de Estados Unidos entre el viernes y la tarde del sábado con fuertes precipitaciones de nieve, helada, vientos fuertes e inundaciones costeras», anunciaron los servicios de meteorología del este del país.
Según las últimas previsiones de este jueves (10H30 GMT), las nevadas más abundantes y los vientos más fuertes (de hasta 90 km/h) de la tormenta Jonas ocurrirán durante el viertes temprano por la tarde y durarán todo el día del sábado.
Las nevadas y el viento «causará condiciones peligrosas con riesgo de muerte y daños a la propiedad», informó el jueves el Servicio Nacional Meteorológico (NWS).
«Estimamos que, las posibilidades de trasladarse serán si no imposibles, sumamente limitadas durante el auge de la tormenta el viernes de noche y el sábado», añadió NWS.
Unos quince estados han decretado alertas, desde los estados de la costa atlántica (entre Nueva York y Carolina del Sur) hasta el estado de Arkansas en el centro del país. La tormenta podría afectar a alrededor de 70 millones de personas.
La capital estadounidense debería ser una de las ciudades más afectadas, pero también Baltimore y tal vez Filadelfia, con hasta 60 cm de nieve. Mientras que Nueva York y Boston, más al norte, deberían evitar las nevadas.
En Washington nevó el miércoles por la tarde, en plena hora pico. Y a pesar de que solo se trataba de tres centímetros de nieve, causó grandes embotellamientos y numerosos accidentes de tránsito.
En el estado de Virginia la policía informó este jueves que había intervenido en 767 choques. Según el canal televisivo WJLA, una persona murió en estos accidentes.