Un grupo armado turco reivindicó el sábado una explosión que tuvo lugar la noche del martes en el segundo aeropuerto internacional de Estambul, y que mató a una trabajadora e hirió a otra.
«Reivindicamos el ataque con disparos de mortero en el aeropuerto Sabiha Gokcen de Estambul«, declaró en su sitio web el grupo de los Halcones de la Libertad del Kurdistán (TAK).
Una mujer de 30 años, agente de mantenimiento, murió por las heridas provocadas por la explosión, mientras que una de sus colegas, de 33 años, resultó herida y tuvo que ser hospitalizada.
El ataque se produjo en el contexto de una nueva gran ofensiva de Ankara en el sudeste de Turquía contra el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
Tras dos años de alto el fuego, el verano boreal pasado se reanudaron los combates entre el Estado turco y los rebeldes kurdos, terminando de facto con las conversaciones de paz iniciadas en 2012 para acabar con un conflicto que ha dejado más de 40.000 muertos desde 1984.
Los responsables turcos consideran al TAK una emanación del PKK, que por su parte asegura no tener control sobre este grupo.
En su web, el TAK, que llevaba tiempo actuando con perfil bajo, afirmó que el ataque en el aeropuerto de Estambul era una respuesta a «los ataques fascistas que reducen a escombros las ciudades kurdas».
El grupo armado turco acusó asimismo al gobierno de Ankara de haber sellado de facto con el grupo Estado Islámico, presente en la vecina Siria, una «coalición» contra los kurdos.