La diabetes ha dejado de ser un mal de adultos para convertirse en la segunda enfermedad crónica más común en la infancia.
Si tu bebé es un gordito porque lo consientes con un dulce o chocolate, le haces tetero con mucha azúcar refinada, te encanta que se distraiga viendo comiquitas (caricaturas) largas horas y no le prestas atención cuando te pide ira al parque a correr o jugar, pues estás empujándolo hacia los brazos de la diabetes.
En el mundo hay más de 22 millones de niños menores de cinco años obesos o con sobrepeso, de los más de 17 millones que habitan en países en desarrollo. Todos, sufren un mayor riesgo de sufrir diabetes tipo 2 (diabetes del adulto).
Agencias