El presidente de Perú, Ollanta Humala, ratificó este sábado el estado de emergencia decretado el viernes por la noche en la provincia de Islay, en Arequipa, al sur del país. La medida, según el mandatario responde a las protestas en contra del proyecto minero Tía María, las cuales en dos meses dejado cuatro personas muertas.
La medida establece la suspensión por 60 días de reuniones y manifestaciones, entre otros derechos constitucionales. Las fuerzas de seguridad han tomado la provincia y tienen derecho a hacer detenciones y allanamientos a discreción.
Según el mandatario, estas acciones tienen como objetivo restablecer el orden, proteger a la población y normalizar las actividades en Islay. Humala afirmó que enlas primeras horas de vigencia de la norma, se logró restablecer la calma, por lo que dejó abierta la posibilidad de levantarla antes de los 60 días.
Agencias