Orlando Rizo es un joven cineasta cuyo cortometraje documental "El Espíritu No Envejece" quedó seleccionado para representar a Nicaragua en el Festival Ícaro Regional, a llevarse a cabo en Guatemala en noviembre de este año.
Tn8.tv contactó a Rizo para que nos contara a mayor profundidad en qué basó este documental y sobre cómo fue el proceso para llegar a concretarlo, quien nos indicó que todo comenzó cuando con un amigo se dispuso a crear un proyecto audiovisual desde varios meses antes de toparse con la historia, hasta que eventualmente se encontró con querer contar las anécdotas de vida y enseñanzas de la profesora Mercedes Castillo, fundadora del preescolar Pasarela Infantil, esto a raíz de querer saber más "sobre lo que legamos a las personas durante la niñez", según nos expresa el joven.
En este preescolar Orlando pasó sus primeros años de vida y fue en noviembre de 2016 que se dio cuenta que dicho centro graduaba su última promoción, por lo que quiso hacer un homenaje a la loable tarea de la profesora Castillo así como de esa institución educativa. "Hablé con la profesora… comenzamos a reunirnos para platicar de su vida, desde su niñez hasta la actualidad y recordar anécdotas relacionadas con su labor como maestra… Ella se encargó de que en los tres días de grabación pudiéramos tenerla en su ambiente de trabajo anterior en el preescolar y también la seguimos en lo que hace ahora: formar a otros docentes", nos comenta Rizo.
Para poder contar esta historia de una forma que tuviera todos los valores cinematográficos adecuados, Orlando ocupó todo lo aprendido a través del Curso Técnicas de Dirección Documental que realizó a comienzos de este año el Centro Nicaragüense de Enseñanza Audiovisual y Cinematográfica (CNEAC) de la Cinemateca Nacional. "Me anoté y vinculé las asignaciones del curso con el documental que ya quería grabar… al final el profesor, Gabriel Serra, con otras dos personas de la Cinemateca, seleccionaron la mía y la de una compañera del curso para ser realizadas. Así logramos grabarlo", asevera.
En cuanto a la logística fue la profesora Castillo quien tuvo que llamar a madres y padres de familia para que llevaran a sus hijos a pasar una mañana en el centro, en una pequeña re-apertura que hicieron para realizar el documental. "La experiencia para ella fue muy emotiva porque implicó volver a su pasado reciente y para el equipo fue un reto porque era la única oportunidad que teníamos para retratar el pasado inmediato de la profesora. Creo que lo hicimos bien", señala Rizo.
El corto documental con poco más de 16 minutos de duración nos muestra a la docente hablar sobre su experiencia en 45 años de carrera como profesora, cómo se relaciona con los niños y la importancia que existe en la educación preescolar, que ella lo describe como un "puentecito peatonal, viene de la casa a la escuela… entonces es el paso, la transición, de la espontaneidad de la casa hacia la escuela formal".
Para finalizar, Orlando espera que este corto documental genere reflexión sobre los temas involucrados en el mismo, pero que cada persona saque sus propias impresiones. "Eso es lo interesante cuando no existe una voz entrometida por parte del autor, sino que se respeta la naturalidad del personaje y dejamos que sea su voz la que cuente la historia", acota el joven cineasta.
