LOS ÁNGELES (Reuters) – E.L. James, la escritora británica y productora de las novelas eróticas y franquicia cinematográfica "50 Sombras de Grey", sabe que su historia sobre una atractiva pareja en medio de una relación erótica es una fantasía.
En la trilogía "50 Sombras", Christian Grey es un multimillonario joven y apuesto con una inclinación hacia ciertas prácticas sadomasoquistas, la disciplina, el dominio y la sumisión, quien introduce a la atractiva pero inocente Anastasia "Ana" Steele a su mundo de látigos y juguetes sexuales.
"Es un lugar al que puedes escaparte, en el que puedes convertirte en Ana, puedes ver qué puedes hacer con este tipo y cambiarlo para que sea un mejor ser humano, y claro, eso es solo una fantasía", dijo James, de 53 años, a Reuters.
La relación de Ana y Christian, en la que él exhibe comportamientos de control y acoso, alimentó un debate sobre violencia doméstica después de la publicación de los libros. Cuando se estrenó la primera película, un grupo instó al público a donar dinero a refugios para mujeres en vez de ver el filme.
"Lo que encuentro realmente molesto sobre estas personas es que las mujeres tienen derecho a sus fantasías también, y un libro es un lugar mucho más seguro para explorar cosas", dijo James.
"Esto no fomenta la violencia doméstica, no es sobre violencia doméstica, no están entendiendo. Sin embargo, es un tema importante así que me alegra que haya surgido", añadió.
La trilogía de James, que nació como una historia inspirada en la historia de amor de la saga de vampiros "Crepúsculo", ha vendido más de 150 millones de copias en todo el mundo desde su publicación en 2012. Se convirtió en un fenómeno cultural pop, dándole un impulso a la literatura erótica, y derivó en una franquicia cinematográfica del estudio Universal Pictures.
La primera entrega, "50 Sombras de Grey", protagonizada por Jamie Dornan y Dakota Johnson, ganó 560 millones de dólares en la taquilla mundial en 2015. La secuela, "50 Sombras Más Oscuras", llegó a los cines el viernes.
Por: Reuters