Los crímenes a manos de pandilleros y mareros en El Salvador ha tenido un gran aumento en los primeros meses de este año en comparación al 2017.
El repunte de ataques de las pandillas contra ciudadanos trabajadores o delincuentes rivales ha hecho que el promedio de homicidios registrados en El Salvador haya pasado este año de 9 a 10 casos por día.
Recientemente las estadísticas de la Policía Nacional Civil indican que entre el 1 de enero y el 18 de febrero fueron ultimadas 494 personas y en el mismo periodo del año pasado (2017) hubo 417 muertes violentas, lo que se traduce en 77 casos más.
El mes pasado cerró con 317 homicidios, 58 más que en el mismo mes de 2017. Aunque en febrero la tendencia se ha mantenido, en 18 días las autoridades han contabilizado 177 asesinatos.
Cabe señalar que el fin de semana anterior fue uno de los más sangrientos del año, dado que las autoridades de la Fiscalía General informaron que hubo 31 homicidios.
Entre las víctimas hay tres hombres cuyos cadáveres fueron encontrados en la vía pública, envueltos en sábanas y dentro de bolsas plásticas.
Los hallazgos fueron en el río Tomayate, entre la colonia Los Ángeles y la colonia San Francisco, de Apopa; asimismo en la colonia Antekirta, de Soyapango, frente a la estación de Sitramss. Mientras que el otro de los fallecidos fue encontrado sobre la Carretera Panamericana, en el cantón Izcasquillo, en Ahuachapán.
También el sábado fueron encontradas asesinadas Adela Argueta y su hija Delmy Martínez, de 50 y 26 años respectivamente. El doble homicidio fue cometido en el cantón Nuevo Edén, en las cercanías de la Plaza de Cocos, en San Luis Talpa, La Paz.
Te puede interesar: Hondureña se corta la oreja en pleno alucín
Igualmente murió María Concepción Catalán, quien resultó herida en un ataque armado dentro de un microbús de la Ruta 6, en Mejicanos, señaló Elsalvador.com
También se sumaron a las muertes violentas los esposos Jaime Alirio Orellana Moreira y Ana Ruth Franco de Orellana, asesinados dentro de su vivienda, en Quelepa, San Miguel.
