Los jueces del Tribunal Penal de Heredia condenaron a un hombre de apellidos Vílchez Alemán a 50 años de cárcel por matar a la exesposa, con quien tenía seis meses de separado, también a su exsuegra y herir de gravedad a su exsuegro.
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Los hechos ocurrieron el 8 de junio del 2016, en calle El Gallito, en San José de La Montaña, Heredia.
El tribunal determinó que el hombre asesinó a Margarita Espinoza Arce de 27 años, quien había sido su esposa, ella vivía con sus padres, Mayela Arce Rodríguez de 47 y Álvaro Espinoza Martínez de 52.
La noche de los asesinatos el hombre llegó a la casa donde estaba Margarita, entró a su cuarto y con un machete la mató, después se fue hasta donde estaba su exsuegra y también acabó con ella.
Don Álvaro lo enfrentó, pero resultó herido de gravedad en una oreja, hombro y espalda, al punto de dejarlo inconsciente.
La Policía logró detener al sospechoso dentro de la vivienda. La causa de ambos asesinatos sería porque Margarita le había puesto la pensión a Vilchez para sus dos hijos y además él había discutido con sus exsuegros.
Los hijos de la pareja y un hermano de Margarita de 14 años vieron lo que ocurrió, pero para salvarse se encerraron en un cuarto.
El hombre tendrá que pasar seis meses en prisión preventiva mientras la sentencia queda en firme, señaló La Teja.
En otro caso, las autoridades costarricenses condenaron a 8 años de cárcel a un hombre por haber abusado sexualmente de sus dos sobrinitas políticas de 6 y 8 años.
El hombre tendrá que pasar los próximos ocho años de su vida encerrado el tabo, esto después de admitir que abusó de dos de sus sobrinas políticas durante la Semana Santa del año 2016.
Se trata de un hombre identificado por las autoridades como José Barquero Vargas, quien escuchó su condena la mañana de este martes en el Juzgado Penal de Pérez Zeledón, tras declararse culpable de cuatro delitos de abuso sexual.
De acuerdo con el Ministerio Público, los hechos por los que Barquero fue enviado al tabo sucedieron en marzo del 2016, en la comunidad de Platanares de Pérez Zeledón.
Según trascendió, durante la celebración de la Semana Santa, Barquero llevó a sus dos sobrinas, de seis y ocho años de edad, a dar un paseo a caballo.
Sin embargo, durante el paseo el condenado aprovechó para tocarlas en sus pastes íntimas, a la de seis años en una ocasión y la de ocho años en tres oportunidades.
Tras lo sucedido las pequeñas se echaron al pico a su tío con sus papás, contándole lo que este les había hecho, por lo que los padres interpusieron de inmediato la denuncia que terminó convirtiéndose en condena.
