El alivio de que este miércoles abandonaría la prisión le duró poco a Herbert Sosa Marín, un empleado de la Alcaldía de San Tecla a quien la Fiscalía General acusa de privar de libertad a una adolescente de 15 años en un rancho privado de la playa San Diego.
El hombre, de 27 años, compareció por la mañana en el Juzgado de Paz del Puerto de La Libertad y el juez decidió que continuara siendo procesado pero sin estar recluido. La única restricción que le puso fue no acercarse a la víctima ni a su familia.
Al mediodía, al concluir el encuentro, el abogado defensor Rolando Aparicio, aseguró que su cliente abandonaría ayer mismo las bartolinas del puesto policial de Conchalío donde ha estado recluido desde hace una semana, señaló Elsalvador.com
Antes de que se iniciaran los trámites para que él quedara libre, el Ministerio Público le imputó un nuevo delito: violación agravada continuada. Los policías que horas antes lo habían llevado custodiado hasta la sede judicial, volvieron a aprehenderlo.
La fiscal del caso explicó que a Sosa Marín se le sumó este delito porque, el 12 de octubre pasado, después de que la adolescente fuera localizada en buen estado de salud en la vivienda del sujeto, ella manifestó a las autoridades que había tenido relaciones sexuales con Sosa Marín en los 12 días que la tuvo raptada.
“Hemos recolectado todos los elementos para establecer la existencia de ese hecho y obviamente la participación del joven; ya se procedió a darle lectura a la orden de detención administrativa por el delito de violación a menor incapaz agravada continuada”, dijo la funcionaria.
El imputado deberá enfrentar dos procesos judiciales distintos. La fecha en la que se presentará la acusación formal por el nuevo delito aún se desconoce. La fiscal y el defensor del trabajador municipal se abstuvieron de brindar detalles del proceso, porque tiene reserva para protección de la víctima.
