Dos policías fueron emboscados y asesinados por narcotraficantes mientras transitaban en una camioneta por una solitaria carretera rodeada de vegetación en el valle amazónico donde se produce la mayor cantidad de cocaína del país, informó el miércoles el gobierno peruano.
"Esto es a todo entender una venganza por la incautación de drogas que yo anuncie hace días", dijo a través de la televisora pública el mandatario Pedro Pablo Kuczynski. El martes Kuczynski mostró a periodistas la incautación de 721 kilos de cocaína que habían partido desde el mencionado Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro.
El viceministro del Interior, Rubén Vargas, añadió que la zona del ataque, en el distrito de Luricocha, es una de las rutas conocidas del narcotráfico que saca la droga desde el valle usando avionetas rumbo a Bolivia y Brasil o por vías terrestres hacia el Pacífico desde donde se embarcan hacia Europa o Estados Unidos. Los narcotraficantes robaron las armas de los policías muertos.
En marzo tres policías fueron asesinados en otra emboscada ocurrida en el valle, mientras que en agosto de 2016 otro policía fue asesinado por narcotraficantes mientras trabajaba como encubierto en acciones de inteligencia en una fuerza de tarea financiada por la agencia antidrogas estadounidense DEA.
El Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro también es un lugar donde se siembra la mayor cantidad de hoja de coca del país, una planta que sirve para fabricar la cocaína. Debido a la oposición de la población, que en las décadas de 1980-1990 venció en sangrientas batallas a Sendero Luminoso, el Estado jamás ha ingresado a erradicar las plantas.
En la actualidad el gobierno dice que los más de 200 miembros de Sendero Luminoso que viven en zonas inhóspitas de este valle se han convertido en sicarios del narcotráfico.
Según datos brindados hace una semana por la zar antidrogas local, Carmen Masías, el narcotráfico en Perú mueve hasta 2.000 millones de dólares anuales y la producción de cocaína en el valle es de 300 toneladas, mientras que en otras partes del resto del país se producen otras 100 toneladas.
De acuerdo a la DEA, Perú es el segundo productor mundial de cocaína.