Ni el viento ni el cosquilleo por el debut fueron obstáculos para la puertorriqueña Mónica Puig, quien superó 6-3, 6-2 a la eslovena Polona Hercog el domingo el en sus primeros Juegos Olímpicos.
Puig, de 22 años y 37ma del escalafón mundial, inició su partido con una hora y media de retraso por una tormenta de viento sobre el complejo olímpico de tenis que afectó la segunda jornada de la competencia.
La puertorriqueña tuvo un comienzo dubitativo 2-0 abajo, pero recuperó el foco y con su potente derecha como arma superó en una hora su primer escollo en Río.
«Honestamente empecé muy lenta, había mucho viento, condiciones bastantes difíciles para adaptarse. Yo también un poco nerviosa por mi debut olímpico», dijo Puig tras la victoria. «Creo que después me adapté muy bien y jugué un muy buen partido».
Puig fue alentada por una veintena de ruidosos compatriotas, entre atletas y amigos, que en varias ocasiones fueron advertidos por el juez que hicieran silencio. Ella les dedicó el triunfo tras el último punto.
«Estaba bien acompañada. Mi mejor amigo, el equipo. Para mí me encanta tenerlos conmigo. Ahora a disfrutar la victoria», dijo la joven, que tras un momento de descanso volverá a entrenarse para «corregir algunas cositas que hoy no me salieron, pero las sabe mi entrenador».
Puig se medirá en la siguiente ronda ante Anastasia Pavlyuchenkova, que venció a la pocala Magda Linette 6-0, 6-3.