Lionel Messi y Javier Mascherano se sumaron el miércoles a las prácticas de una selección de Argentina que tiene tres jugadores mermados, entre ellos su atacante Ezequiel Lavezzi, de cara a la Copa América Centenario y a un amistoso previo el viernes en casa ante Honduras.
El atacante y capitán Messi, gran figura del fútbol mundial,y el mediocampista Mascherano vienen de ser campeones de la Liga española y de la Copa del Rey. Junto con ellos arribó el volante Ever Banega y los tres se incorporaron de inmediato al entrenamiento de la selección a puertas cerradas en la vecina ciudad de Ezeiza.
El equipo que dirige Gerardo Martino tiene a tres jugadores entre algodones: los mediocampistas Javier Pastore (PSG, Francia) y Nicolás Gaitán (Benfica, Portugal) y el atacante Ezequiel Lavezzi (Hebei Fortune, China), este último el único sobre el que hubo un parte médico oficial. Lavezzi acusa una lesión en el aductor de su pierna izquierda.
Argentina encara la Copa América Centenario con la obligación de cortar una sequía de 23 años sin ganar un título oficial. Su última consagración fue cuando se alzó con la Copa América en Ecuador en 1993.
«Argentina tiene que ganar algo, debemos estar tranquilos que cuando más juntos estemos mejor van a salir las cosas», sostuvo Banega a su llegada al Aeropuerto de Ezeiza.
«Sentimos siempre esa presión (por ganar) pero esta Copa no es una revancha, simplemente vamos a afrontar el torneo con las mismas ganas con las que fuimos en la pasada y ojalá podamos estar otra vez en las instancias finales», agregó Banega, que participó en la Copa América de 2015 en que Argentina perdió la final con el local Chile.
Argentina, que también cayó en la final de la Copa Mundial de 2014 ante Alemania, debutará el 6 de junio contra Chile en Santa Clara, California, luego enfrentará a Panamá el 10 en Chicago y cuatro días después a Bolivia en Seattle.