El estadio de Anoeta, en San Sebastián, medirá el sábado la temperatura de la liga española que comanda con relativo margen el Barcelona antes de su visita el sábado a la Real Sociedad. El historial de partidos en feudo «txuri-urdin» está plagado de tropiezos del cuadro barcelonista, que jugará después de que sus perseguidores, Atlético de Madrid y Real Madrid, hayan enfrentado respectivamente a Espanyol y Eibar en el inicio de la jornada.
Con 76 puntos cosechados en las 31 fechas disputadas, el Barsa lidera el campeonato con siete unidades de ventaja sobre el Madrid y seis respecto al escolta Atlético, al que viene justamente de derrotar por 2-1 el martes por el choque de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones.
Calentada la vuelta, programada para el miércoles en Madrid, al Barsa le importuna sobremanera el obstáculo que presenta la Real, equipo al alza que clasifica décimo de la mano del timonel Eusebio Sacristán, quien dirigió previamente al filial azulgrana.
El cuadro vasco ha salido vencedor en tres de sus últimos cuatro cruces de local con el Barsa, que no gana en Anoeta desde 2007. La última derrota del equipo catalán, hace una temporada, desató una mayúscula tormenta institucional que amenazó con cobrarse el cese del actual técnico Luis Enrique, acabó con la destitución del director deportivo, Andoni Zubizarreta, e impulsó la convocatoria de elecciones a la presidencia.
Enderezado el rumbo, el Barsa logró finalmente celebrar la consecución del triplete de liga, Champions y Copa del Rey de la mano del tridente que forman el astro argentino Lionel Messi, el uruguayo Luis Suárez y el brasileño Neymar.
Ciento nueve goles les confirman en la actual campaña, aunque Messi no ha marcado en sus últimos tres partidos, incluida la última fecha, en que los catalanes se despidieron de una racha de 39 partidos invictos al perder 2-1 en su estadio con el Real Madrid, en el clásico español.
Fue el segundo tropiezo seguido en el torneo doméstico del vigente campeón, que antes había empatado 2-2 en cancha del Villarreal, y tampoco resultó demasiado convincente la remontada europea al Atlético, posibilitada por dos goles de Suárez con un hombre más sobre la cancha.
El uruguayo no podrá estar en Anoeta por sanción, al haber acumulado ciclo de cinco tarjetas amarillas, mientras que Neymar y los laterales Jordi Alba y Aleix Vidal andan renqueantes. Messi, recién señalado en un nuevo caso de corrupción fiscal de dimensión internacional, está a un gol de celebrar los 500 en su carrera profesional, y ansia un triunfo que enfríe definitivamente la liga a falta de seis partidos tras la 32da fecha.
Ayudarían sin duda nuevos tropiezos de Madrid y Atlético. Los primeros ya sufrieron un duro golpe el miércoles en Wolfsburgo, donde perdieron por 2-0 en su eliminatoria europea, obligándose a una épica remontada el martes en Madrid.
Perdido de golpe el crédito ganado en el clásico, el técnico Zinedine Zidane debe recalibrar las prioridades de los merengues: si pujar de nuevo por una liga que descartó en su momento, o reservarse ante un Eibar que acumula siete fechas sin ganar, y perseguir con mayor ahínco otra proeza en la Champions.
«Nos faltó intensidad y movilidad», reconoció Zidane tras perder en Alemania. «Pero el primer partido que tenemos es el del sábado. Es lo bueno que tiene el fútbol, que da la oportunidad de rehacerse».
El central Sergio Ramos, también sancionado, se perderá seguro el duelo liguero y el goleador Karim Benzema es duda por un golpe en la rodilla, mientras que Cristiano Ronaldo, quien anotó el tanto de la victoria ante el Barsa, querrá seguir añadiendo a su total de 29 dianas como máximo cañonero.
Al técnico argentino Diego Simeone le preocupa el desgaste físico de su Atlético, de cara a la visita al 13er clasificado Espanyol, que lucha por alejar de una vez por todas los fantasmas del descenso. Los rojiblancos jugaron casi una hora con un hombre menos ante el Barsa, se desquiciaron con el árbitro y siguen sin poder contar con el central uruguayo José Giménez, pendiente aún de recuperarse para la vuelta europea, ni su compañero de línea Stefan Savic.
El séptimo Sevilla y sexto Athletic de Bilbao se miden entre sí el jueves por la Liga Europa, antes de enfrentar el domingo a Valencia y Rayo Vallecano en la liga, respectivamente. El cuadro valencianista anda en preocupante caída, a solo seis puntos de la zona del descenso, tras cesar hace dos fechas a su segundo entrenador de la temporada, Gary Neville.
Otro equipo en apuros, el penúltimo Getafe, visitará al cuarto Villarreal también en la jornada dominical, que se completa con el cotejo Sporting de Gijón-Celta de Vigo.
Betis y Levante se cruzarán el sábado. La fecha arranca el viernes con Granada-Málaga y cierra en lunes con Deportivo La Coruña-Las Palmas.