El músico estadounidense Bruce Springsteen zanjó la polémica sobre la final de la Copa del Rey del fútbol español.
La estrella del rock anunció que se presentará en el estadio Santiago Bernabéu el próximo 21 de mayo, lo que descarta la posibilidad de que el feudo del Real Madrid acoja la final de Copa que enfrentará su archirrival, el Barcelona, con el Sevilla.
Ambos equipos querían jugar el partido en ese escenario, la cancha neutral más grande del país, pero el Madrid no lo había ofrecido como sede. Al parecer el club blanco querría evitar la posibilidad de que el Barça celebrase un título en su césped, como sucedió en 1997 cuando el Barsa ganó la final y su himno sonó por los altoparlantes del estadio.
Oficialmente el Madrid no se había opuesto a ser anfitrión de la final, como pasó el año pasado cuando argumentó que no podía albergar el encuentro entre el Barcelona y Athletic de Bilbao por obras de remodelación.
Se espera que el partido se dispute en el estadio del Atlético de Madrid, el Vicente Calderón, cuya capacidad de 55.000 espectadores es unos 30.000 menos que el Bernabéu. Otra alternativa es el Mestalla del Valencia. La sede se definirá en reuniones esta semana.
La final del torneo está prevista para el 21 de mayo, pero podría retrasarse un día si el Sevilla llega a la final de la Liga Europa que se jugará el 18 de ese mes. Aun con el cambio de fechas, el Bernabéu no estaría disponible.
La final casi siempre se juega en una sede neutral, aunque el año pasado se jugó en el Camp Nou, y en 2013 se disputó en el Bernabéu, donde el Madrid perdió ante el Atlético.
El técnico del Sevilla, Unai Emery, se opuso recientemente a jugar en el Camp Nou por la ventaja que otorgaría al anfitión.