Lionel Messi se repuso de su reciente intervención renal con un golazo de tiro libre directo y dos asistencias claves para que el Barcelona arrollara de local 6-1 al Celta de Vigo el domingo, también con triplete del uruguayo Luis Suárez, e hilvanara su 30mo partido invicto en todas las competiciones, reforzando una semana más su liderato de la liga española.
A primera hora, Fernando Torres volvió a marcar y el gol 101 del ariete con el Atlético de Madrid permitió al cuadro rojiblanco imponerse 1-0 en cancha del vecino Getafe y mantenerse tres puntos por debajo de los 57 que ostenta el líder y vigente campeón.
El cuadro azulgrana tiene también mejor balance goleador, así como un partido pendiente contra el Sporting de Gijón, correspondiente a la 16ta fecha y programado para el próximo miércoles.
El Real Madrid, que ganó el sábado por 4-2 al Athletic de Bilbao, es tercero con 53 puntos y debe medirse al Atlético en el clásico madrileño dentro de dos semanas.
Messi se trató de unos problemas renales el martes, descansó el miércoles cuando el Barsa selló en Valencia el boleto para la final de la Copa del Rey y abrió el marcador ante el Celta a los 28 minutos con su 13er tanto liguero.
El astro argentino sirvió también a los 59 el de la victoria al uruguayo Luis Suárez, quien repitió a los 75 y 81 y rebasó al madridista Cristiano Ronaldo como máximo cañonero del torneo, ahora con 23 dianas en las 24 fechas disputadas.
El uruguayo completó su «hat-trick» gracias a un imaginativo penal forzado por Messi, quien en vez de ejecutar la pena máxima directa, pasó la pelota para que la empujara Suárez. Un gol que ya dibujó en 1982 otro ídolo barcelonista como Johan Cruyff, cuando jugaba en el Ajax.
«Si lo hago yo, seguro que me caigo», bromeó el técnico, Luis Enrique, quien no consideró la jugada una falta de respeto. «Es legal. Nuestros jugadores intentan pasarlo bien y hacer disfrutar a la gente, pero en este país se acepta más un patadón que una filigrana».
En un arrasador último cuarto de hora, Suárez tuvo tiempo de asistir también los tantos de Ivan Rakitic (84) y Neymar en los descuentos frente al equipo dirigido por el argentino Eduardo Berizzo, que niveló transitoriamente gracias a un penal transformado por John Guidetti (39), pero no pudo evitar caer al octavo lugar con 35 puntos.
Torres, con su gol en el segundo minuto, decantó la balanza contra Getafe y sumó una nueva diana tras truncar su sequía realizadora la pasada fecha, cuando celebró su gol centenario en la victoria por 3-1 sobre el Eibar. Curiosamente, el despertar del Torres se produjo justo después de que el Atlético traspasara al colombiano Jackson Martínez.
«Seguimos en nuestra línea», comentó el timonel argentino Diego Simeone. «La lógica dice que el Barcelona fallará poco. Encaramos al Villarreal».
En otros partidos, Sevilla se impuso 2-0 a Las Palmas, Eibar también 2-0 al colista Levante y Real Sociedad 3-0 al Granada.
Sin fútbol excelso al inicio, pero voluntad férrea y fe ilimitada en su poderoso tridente ofensivo, el Barsa inclinó pronto la cancha ante el Celta, y gozó de dos buenas ocasiones en un tiro libre directo de Messi, ligeramente desviado, y un remate forzado de Neymar tras delicioso pase filtrado por Andrés Iniesta.
También la tuvo Josep Señé por los visitantes, pero Claudio Bravo repelió con firmeza, y el arquero chileno también sacó una posterior volea en carrera de Claudio Beauvue.
Para entonces, el Barsa ya mandaba en el marcador por obra y gracia de Messi, quien aprovechó un segundo tiro libre forzado por Suárez y dibujó una parábola imparable que recorrió 25 metros rumbo al rincón izquierdo de Sergio Alvarez.
Pero el equipo de Berizzo no se achantó, sacó a relucir su nervio y forzó un error de Jordi Alba, torpe en el derribo en el área a Guidetti, quien transformó el penal con seguridad.
El Barsa salió en tromba tras el descanso y en particular Neymar, cuyo regate rebozando la pelota dejó atrás al argentino Gustavo Cabral y el balón franco para Suárez, mal definidor al poste largo.
Los locales masticaron el balón largo rato, hasta que cayó el segundo gol, rematado por Suárez a bote pronto tras precisa asistencia picada de Messi.
Con el partido cuesta abajo, el argentino aceleró y habilitó a Neymar, cuyo cruce empujó sobre la línea Suárez, igualmente beneficiado del penal ingeniado por Messi, primero con diablura ante Jonny Castro, luego con guiño a un histórico como Cruyff y cesión al máximo realizador barcelonista.
El quinto de Rakitic lo facilitó el charrúa, quien también lanzó en el sexto a Neymar, hábil para picar sobre Alvarez y finiquitar una goleada estratosférica.