Jaqueada por el escándalo de corrupción de la FIFA que provocó el encarcelamiento de sus últimos dos presidentes, la CONCACAF anunció el lunes una serie de reformas, que incluye la disolución de su actual comité ejecutivo, nuevos controles de ética y limitación de los mandatos.
El amplio paquete de medidas busca instaurar transparencia en las estructuras del organismo rector del fútbol en Norteamérica, Centroamérica y el Caribe, que agrupa a 41 federaciones nacionales.
Los miembros de la CONCACAF deberán debatir los cambios de los estatutos en un congreso extraordinario de la confederación, que se realizará el 25 de febrero en la ciudad de Zúrich.
El actual comité ejecutivo, integrado por siete miembros, será disuelto y reemplazado por un consejo de 15 integrantes. El nuevo consejo debe incluir miembros de cada una de las tres áreas geográficas de la CONCACAF, además de incorporar a tres integrantes independientes.
Las reformas se precipitaron por el escándalo de corrupción desatado por la investigación de la justicia de Estados Unidos, que ha acusado a dirigentes y empresarios en América Latina dentro de una trama de sobornos por la adquisición de los derechos de transmisión y comercialización de los torneos, tanto de la CONCACAF como de la Confederación Sudamericana (CONMEBOL).
Jeffrey Webb y Alfredo Hawit, los últimos dos presidentes de la CONCACAF, fueron detenidos en Suiza el año pasado y luego extraditados a Estados Unidos por su vinculación en el caso. Jack Warner, otro ex presidente, también fue procesado.
En otras propuestas, la CONCACAF creará comités independientes para abordar aspectos de gobernabilidad, auditoría, cumplimiento y finanzas. Los responsables de las áreas de compensación y de auditoría y cumplimiento solo podrán ser miembros independientes.
Asimismo, todo candidato a la presidencia, el consejo, los comités, organismos judiciales y altos cargos deberán someterse a una revisión por parte del comité independiente de ética.
En cuanto a los límites de los mandatos, los miembros del consejo de la CONCACAF y los comités independientes no podrán pasar de los 12 años, ya sea consecutivos o no, en sus puestos.
Además, el congreso de la CONCACAF tendrá la potestad de revisar y aprobar anualmente las remuneraciones y otras compensaciones a los personeros de la confederación.
Y también se guardará el derecho de auditar a cualquiera de sus asociaciones miembros que reciban dineros de la CONCACAF «con el objeto de asegurar de que estos fondos se inviertan en dicho fin».